El local tenía 2.30 m de altura, entre el suelo forjado y techo acabado. Tenía una superficie de más de 300 m2. Se hizo una división perimetral para los despachos que daban a la fachada y una gran sala central que había que climatizar, con tan poca altura que los sistemas convencionales de conductos quedaban descartados.
Además en las oficinas se quería también instalar un sistema domótico de control de accesos e instalaciones, con lo que la cantidad de cableado y tubos que iban por el techo, hizo que tuviéramos que bajar nuestro techo acabado en algunos puntos hasta 15 cm, ya que en el plenum no había capacidad para tantos tubos ni que circulara el aire climatizado.
El sistema Climaclick permite la salida del aire solo en el perímetro de la sala, pero toda la superficie por donde circula el aire se convierte en una superficie radiante de frio o de calor según la necesidad.
Además se utilizo una lamina negra alto brillo para potenciar la reflexión y quitar en lo posible la sensación de techo bajo, apenas 227cm de altura, así como la integración de unos lucernarios gigantes situados sobre las mesas de trabajo que ayudan a eliminar la angustia de trabajar en unas instalaciones sin luz exterior.
7 julio, 2016